24 agosto 2006

Dia 9 Roma - Roma - Km (3750)

Fui con Francisco, compañero de habitación colombiano, a visitar el foro Palatino y el interior del Coliseo a primera hora. Las tripas del recinto que albergaba las diversiones sangrientas del emperador y los habitantes de la Roma antigua. La llamada “arena” donde luchaban los gladiadores realmente reposaba sobre unos tableros. Estos estaban apoyados en el laberíntico sistema de pasadizos y cimientos. Algunos de estos eran trampas con animales salvajes. Salían para atacar a los gladiadores y enloquecer al público. Me gusto imaginarme todo aquello en aquel soleado día de agosto.
Después recorrimos los antiguos foros de la capital romana. Lugar de grandes pensadores, políticos y emperadores. Algunas de sus residencias debieron ser alucinantes, pero con el paso de los años se fue construyendo “encima”. Diferentes iglesias, edificios públicos,… y ahora todo estaba un poco confuso y mezclado.
Caminamos por Roma. Estaba limpia, reluciente y no muy congestionada. Que raro todo lo contrario de lo que me habian dicho. Y llegamos al Panteón; con el que de verdad queria compartir mi 25 dia de cumpleaños. Y no me decepcionó. Es el edificio mejor conservado de la época romana y para mí el más impresionante. Allí dentro se crea un espacio genial. El óculo central de la gran cúpula por el que entra la luz, como un chorro sobre la oscuridad, tiene la medida exacta. Las sombras sobre el revestimiento de la cupula van cambiando al girar el chorro de luz. Abajo los turistas boquiabiertos observábamos el espectáculo con el cuello dolorido. Y recordando los giros de la Tierra. Situado allí en medio de la cúpula, evadiéndome de los cientos de turistas, dialogando con el edificio que mas me ha impresionado cumplí 25 años. Eran la 13:14.
Me hubiera quedado más allí, pero Francisco ya me miraba con cara rara, y de hambre. Le invite a la pasta y el invitó al helado. Después nos separamos. Hasta la próxima.
Visité el Vaticano y San Pedro. Vi las tumbas de los Papas, la capilla Sixtina y subí a lo alto de la cúpula para ver Roma a la altura de las esculturas. Recorrí las hermosas plazas italianas, callejee, pasee junto al Tiver, saboree la pizza romana, visite museos y galerias, descanse de la bici, me infle a helado,… Que suerte que todos los caminos lleven a Roma. Esta ciudad es un bonito alto en el camino. Allí se respira historia.